
Jack Bally un constructor aficionado norteamericano no tuvo mejor idea que construir una réplica del cuatrimotor B-17 en escala 1:3. La “Fortaleza Volante” (Flying Fortress), fue un bombardero famoso de la segunda guerra mundial. Con unos planos en escala 1/9 de un aeromodelo Jack empezó a pensar su réplica y tuvo la ayuda de un familiar ingeniero aeronáutico para realizar el cálculo estructural. El quería potencia de sobra y decidió instalar cuatro motores Hirth F-30 de dos tiempos y cuatro cilindros en configuración bóxer. Los Hirth, tienen 80 HP cada uno y son refrigerados por aire. El Hirth requiere una reductora para la hélice pero en el caso de la réplica del B-17 lo usarán en directo con hélices de 117 centímetros de diámetro. Calculan que de esta manera obtendrán unos 60 hp por motor a 3300 rpm lo que hace un total de 240 hp de potencia para el avión. Jack ya tiene construido la estructura prácticamente en un 100% faltando la instalación de los motores.